sábado, 6 de septiembre de 2014

El Sindic de Greuges.

Yo no lo quito

Entre las muchas opiniones que hemos tenido ocasión de oir cuando se trata de la corrupción en Cataluña, ninguna puede ser más interesante que la del antiguo militante de Iniciativa per Catalunya, (digamos que el antiguo PSUC en versión menos stalinista) Rafael Ribó.


Y decimos esto porque Rafael Ribó ha sido durante años el "Sindic de Greuges" (Síndico de Agravios) del Gobierno de la Generalidad de Cataluña. Lo que en nuestra lengua "vernácula" se llama Defensor del Pueblo. Porque aquí los que hablamos en la lengua de Cervantes lo hacemos en lengua vernácula, o sea, no oficial.

Quizás deberíamos decir primero que don Rafael Ribó i Massó es hijo de un secretario de Francisco Cambó (líder de la burguesía catalana que ayudó a Franco durante la guerra de 1936-39), lo que nos hace pensar que al padre le debió salir el niño respondón porque, tras haber sido "escolta" del Casal de Montserrat, a los 18 años fué miembro del Sindicato Democrático de Estudiantes de la Universidad de Barcelona. En 1977 ingresó en el PSUC y posteriormente a Izquierda Unida, Tras enfrentarse a Julio Anguita , que era el líder de Izquierda Unida, formó el partido Iniciativa per Catalunya Verts pero cedió el liderazgo a Joan Saura en el año  2003.

Y si lo traemos a esta página es porque una de sus últimas declaraciones han sido lo siguiente:

"Combatir las malas gestiones y las irregularidades de Pujol y su entorno se remontan a cesiones en el Parlamento del año 1983, por la mala gestión de Banca Catalana. Pero este caso no fué el único, ya que le siguieron el tema de Casinos, que a raíz de unos despidos laborales del casino de Lloret de Mar, fuimos tirando del hilo y salió un cúmulo de irregularidades. Teníamos pruebas del desvío de fondos a las arcas del partido de hasta 1.000 millones de pesetas. Lo llevamos hasta el juez, pero el caso se archivó. Llegué a recibir amenazas anónimas orales y escritas sobre este tema, que las puse en manos de la Policía. Después también planteamos la vinculación de las empresas de la familia Pujol con  la Administración catalana".

Y a la pregunta: ¿Qué respuestas recibieron al respecto? Ribó respondió:

"Las respuestas que tuvimos fueron evasivas, cuando no mentiras".

Ante una situación como ésta, lo menos que uno puede hacer es preguntarse si el cargo de Sindic de Greuges no debería suprimirse y aprovechar lo que se ahorre en beneficio de, por ejemplo, la Sanidad. 



Aunque hay que reconocer que el señor Ribó ha solicitado ser desaforado. Mientras tanto, delante de la casa donde vive Jordi Pujol se siguen produciendo cosas como éstas




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